Después de consultarlo con la familia de Corso, tomamos la desición de castrarlo.
Las razones de tomar esta desición es en algunas ocasiones complicada. Muchos clientes que llegan a empireDOG me preguntan si esterilizar o no, y aunque tengo una opinión muy clara al respecto, trato de no postularme, porque es una acción que no tiene vuelta atrás.
Si tenemos un macho (sin castrar) y somos capaces de controlarlo bien porque no tiene un nivel jerárquico muy alto o porque somos unos excelentes guías no castrarlo NO supone un problema de conducta. Otra cosa es si el perro tiene "sus necesidades" cubiertas y ésto, a no ser que sea un ejemplar dedicado en ocasiones a la monta y reproducción, me parece complicado. También esta el tema sentimental de querer tener un cachorro de tu perro, respetable pero a todas luces innecesario tener una camada por un cachorro (aunque a veces sale bien y conseguimos hogares para todos los cachorros de esta camada).
El camino de la castración hoy en día es bastante utilizado y aunque no lo recomiendo normalmente por un problema de conducta, pues hay casos en que la castración no ayuda, es más, en algunos casos es contraproducente; si es el camino más ético en muchos casos. No hay más que ir a los innumerables albergues y ver la cantidad de perros de raza y mestizos que no encuentran un hogar.
Yo, personalmente, he encontrado y son ahora parte de mi familia perros de refugio con excelentes conductas que sólo necesitan la oportunidad de tener un hogar.
En el viaje y el pre-operatorio de Corso se portó muy bien y aunque el veterinario nos pidió que nos quedáramos hasta que se durmiera completamente Corso no dio ninguna señal hostil. Ahora toca empezar su recuperación y el trabajo de obediencia para ver que tal acepta nuestro amigo que pongamos reglas a su nueva vida, pero para eso cuento con un as en la manga... Mi Clicker...
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Marta (kora) (viernes, 31 agosto 2012 00:02)
Ay que bonito , estoy esperando a ver el final de la historia que sera impresionante